jueves, 29 de mayo de 2025

LOS YOLOFOS ENMARIGUANAOS

 

LOS YOLOFOS ENMARIHUANAOS
Por Francisco Cadrazco Díaz Román
Escritor

Los yolofos son unas aves pequeñas que vuelan en manadas, se comen las cosechas de maíz, arroz y todo lo que contenga semillas. En la sierra había una cosecha de Marihuana ya seca porque sus dueños no habían podido subir a cortarla, los yolofos se percataron de la semilla seca y bajaron en grupos a comer semillas, con lo que no contaban ellos era que esa semilla los dormía en un sueño entre oscuro y claro, pasaron así toda la noche, a la mañana que llegaron los obreros a recoger la cosecha, se encontraron con una bandada de yolofos adormitados sin poder volar. Colocaron una grabadora de 12 tacos y la pusieron a sonar con una guaracha de moda. Uno de los yolofos que era parrandero le dijo al otro, hey mi vale estas escuchando esa música, voy es a bailar y uno por uno fueron despertando y se formó la rumba con los yolofos enmariguanaos y bailando.

UN CERDO HIPPIE

 

UN CERDO HIPPIE
Por Francisco Cadrazco Díaz Román
Escritor

Era la época de los humanos hippie, que recorran las carreteras del mundo, pidiendo un aventón para avanzar a su destino. Una tarde sobre los últimos rayos del sol en el poniente, venia Juancho Ramírez en su camión, con un viaje de cerdos para el matadero del pueblo, traía exactamente 27 cerdos engordados con maíz cariaco, en el camino vio a la figura haciéndole señas para que parara el vehículo y lo recogiera, a la bondad y buenas vibras de Juancho, bajo la velocidad y le hizo señas que se subiera atrás con los cerdos, no le vio la cara por las melenas de cabellos del hippie, al llegar al matadero Juancho notó que el humano no estaba en el camión, se dijo para sí, se bajó y no dio las gracias, bajó los cerdos, los conto y sobraba uno peludo, melenudo y grande. Fue cuando le dijo al matarife que tazaran ese cerdo y le pusieran precio porque no estaba incluido en el lote, acordaron un precio y lo bajaron, lo que no sabían ellos es que ese cerdo melenudo era el hippie que en el trayecto con los 27 cerdos se volvió igual que ellos, simplemente se quedó dormido y cuando despertó ya era un cerdo, encerrados en un chiquero el cerdo hippie siguió durmiendo revuelto con la manada, hasta media noche cuando el gallo basto con su reloj biológico anuncio las 12 d la noche. Sobresaltado el cerdo hippie se levantó, se salió del corral y cogió carretera, los transeúntes se lo quedaban observando por su pelaje y estatura, a la mañana siguiente lo iban a sacrificar de primero, con la sorpresa que ya no estaba, salieron en su búsqueda preguntando si habían visto al cerdo hippie, unos decían que lo vieron llegando a Aguasblanca, otros que iba por la carretera hacia Mariangola, una señora dijo que ese cerdo hippie iba llegando al Valle. En el camino de huida del cerdo hippie ya se había convertido en humano y los que lo buscaban le preguntaron por el cerdo hippie, el con una sonrisa dijo que lo había visto en Barranquilla.